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| El arqueólogo Wanderson Ezquerdo, responsable del hallazgo en el interior de una de las cámaras funerarias encontradas ( Foto: Pagina siete - Ministerio de Culturas) |
Se trata, definitivamente de un hallazgo extraordinario y de gran importancia para la arqueología boliviana. No obstante, es prioritario y extremadamente urgente que intervenga un equipo de conservadores calificados y con mucha experiencia en materiales como los encontrados, su mal manejo o exposición a ambientes inadecuados con seguridad se traducirá en daño y pérdida de información arqueológica y del patrimonio.
Un segundo aspecto es el congelamiento de cualquier actividad extractiva en la zona, cuyo radio debe valorarse adecuadamente por mayores estudios prospectivos. Afortunadamente la Ministra de Culturas y Turismo ya declaró que se están tomando las medidas de cautela y protección correspondientes.
Un tercer aspecto es el de observar con mucho escrúpulo, las consideraciones éticas respecto a los restos humanos, que si bien deben ser estudiados, también es necesario que se respete el lugar y la manera en la que fueron enterrados. Su exhibición es censurada desde la Sociedad de Arqueología de La Paz, quien se adscribe a los acuerdos y declaraciones emitidas en el concierto de la Asociación Mundial de Arqueología, incluso si existieran las condiciones materiales para hacerlo.
Como mencionaba el Jefe de la UDAM en la nota de prensa: Será necesario disponer de un fondo extraordinario de recursos económicos para proteger, conservar y estudiar este sitio arqueológico con todos sus componentes. El hallazgo admira y preocupa a la vez, pero es notorio que tanto el estado como las gobernaciones deben estar preparadas para este tipo de sucesos. Bolivia es un lugar poco estudiado aún por la arqueología y muchos descubrimientos como este vendrán con más frecuencia en el futuro, para lo cual las instituciones de cultura del estado central, de las gobernaciones y los municipios deben estar preparadas. Se requiere para ello infraestructura apropiada, personal capacitado, equipamiento, normas y procedimientos claros, alianzas con universidades nacionales e internacionales y laboratorios especializados, entre otros.
Finalmente, es necesario recordar que de acuerdo a los protocolos de intervención establecidos en la Ley 1333, un hallazgo de tal magnitud -comprendido tanto en su valor cultural, patrimonial y de investigación- debería haber sido respetado en su integridad y por lo tanto, tratado de una manera diferente; esto es: conservando el sitio (más aún considerando su particularidad y que, al menos una parte, no se encontraba impactada por la intervención humana o natural previa), paralizando la explotación del lugar y reservando las cámaras de inhumación para evitar su raudo deterioro; posibilitando así una investigación profunda, detallada y eficaz, que atienda no sólo a los requerimientos de investigación y/o exposición (como parece ser el caso), sino también al respeto que debe merecer una necrópolis del pasado y a las condiciones OPTIMAS de conservación de los restos humanos.
https://www.paginasiete.bo/cultura/2018/11/8/descubren-necropolis-pos-tiwanaku-en-viacha-199507.html
1 Comentarios:
Me eximo de comentar el artículo por este mismo medio, pues no quiero engordar a las carroñeras. Lo haré por vía particular
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